La Sala Laberinto
Cuando entras en esta habitación, ves una sala de estar bastante común, quitando las gruesas paredes y el suelo -bajo el cual se ven diversas flores- de cristal. A la derecha de la entrada, hay una sencilla mesa para 6 personas con sus sillas; al fondo a la derecha, una chimenea rodeada completamente de sofás y sillones; a la izquierda de la entrada, las mascotas del internado: la jaula de un loro de diversos colores, la pecera de varios peces multicolores...; y al fondo a la izquierda, algunas estanterías con juegos de mesa o libros seleccionados al azar.
Sin embargo, estas cuatro secciones están separadas por finas paredes de cristal completamente limpias, por lo que es imposible ver dónde empiezan y dónde acaban sin tocarlas. Para pasar a cada sección hay una sola puerta, muy pequeña y que va cambiando de lugar constantemente, por lo que nunca sabes por dónde vas a poder salir y podrías quedarte encerrado un buen rato por aquí. Algunos dicen que, a veces, las puertas desaparecen...