Los pasillos [Zona de Rol]

Noto como alguien me observa. Miro a mi alrededor y me encuentro con la mirada de la chica que ya estaba allí, quizá le había molestado que yo hubiese aparecido por aquí. Aparto la mirada, dirigiéndola ahora, hacia el suelo. Me muerdo el labio inferior, un poco incómoda por la actitud que ambas estábamos manteniendo.Me recojo un mechón de pelo rebelde tras la oreja. Cambio el peso de mi cuerpo de un pie a otro ..

Noto como se hacerca, más no me atrevo a alzar la mirada hacia ella. Continuo escuchando el sonido de sus tacones. Mi timidez se va transformando en curiosidad.
Dirijo mi mirada a su cara, esquivando sus ojos. Me detengo en su cuello y aparto la mirada rapidamente, para, esta vez si, mirarla a los ojos cuando me habla.
-Mmm...Estaba paseando y me perdi.- sonrio abiertamente.

De pronto la chica parece nerviosa. Se toca la cara, parece preocupada. Observo su cara, la mano y la muñeca. Intentando averiguar que ocurre. Continuo mirandola con el ceño fruncido y la cabeza ligeramente ladeada..
-Lo dudo.- digo tras escuchar su comentario y observo su muñeca, de pasada...

Frunzo el ceño todavia más cuando escucho su pregunta. Echo la cabeza hacia atras extrañada.
-No, ¿acaso deberia?- digo sonriento, un poco mas relajada. Me vuelvo a colocar el mechon de pelo tras la oreja.

Me aparto algunos pelos de la cara. Para volver a mirarla a los ojos con curiosidad.
No comento nada tras su primera pregunta y continuo mirándola fijamente.
-¿Acaso debería tenerte miedo?- dijo sonriendo sin apartar la mirada de ella.- He visto a otros como tu antes.- digo encogiéndome de hombros...Todos unos individuos muy curiosos.

La miro con mas curiosidad despues de sus comentarios.
-Tampoco te encuentro especialmente interesante.-digo, me muerdo la lengua tras el comentario, arrepentida.- Por aquí eres el primer vampiro que veo.- digo con el tono mas amable que tenía. La primera "persona" que conocia y no había empezado bien...Suspiro tras este ultimo pensamiento..

Vuelvo a suspirar tras su comentario, sintiéndome un poco abatida.
-Ya...- digo aburrida, me froto los ojos con las manos.
-Ya...- digo de nuevo tras su segunddo comentario. Me deslizo a sentarme en el suelo, con la espalda apoyada en la pared. Mirandola de nuevo, un poco melancólica..

Miro a la chica, ¿acaso había sido desagradable? si ni siquiera sabía su nombre.
Me levanto para abrir, al igual que ella, la ventana. Salto hacia afuera, sin hacer ruido y evitando que me vea. Doy una vuelta al edificio volando. No aguantaba estar tanto tiempo con las alas cerradas. Vuelvo a entrar por la misma ventana. Sentándome de nuevo, con el pelo tremendamente despeinado y la ropa un poco descolocada.
-¿Como te llamas?.- pregunto con la cabeza apollada en la palma de la mano.

La miro, parece alterada, supuse que me habría visto.
Le sonrio contenta, a la mayoría de las personas que veian a un ángel por primera solia impresonarles bastante. Aunque aquella no había sido mi intención.
-Ollie.- dijo recordando al gato de los Lefevre, y a raiz de eso muchas otras cosas. Me quedo empanada mirando los pies de Níobe.

-¿Que significa Níobe?- digo todavia un poco distraída. No conocia a nadie con ese nombre, y eso que conocia nombres muuuy raros. Le sonrio, finalmente la chica me había caido bien. Y yo a ella, sino, no se habría preocupado cuando me tire por la ventana.
Esto demostraba que los vampiros tambien son buenos y piadosos. Y nada me podia hacer mas feliz que descubrir eso en cualquiera..

Asiento sin decir nada tras su respuesta, me levanto agilmente para apoyarme a su lado y observar, al igual que ella el paisaje helado.
-¿Cuanto llevas aquí?.- pregunto con amabilidad y una sonrisa. Me marcho del sitio sonriendole..