La orilla del lago [Zona de Rol]

Recuerdo del primer mensaje :

*Mis ojos se vuelven del todo verdes*

-Hola*saludo a todos*

-No, de hecho acabo de rendirme.
Señalo en papel en el suelo.
-No es por nada, pero resulta algo frustante repetir 3 veces por día he decidido dejar de fumar. Lo que daría por uno ahora.
Saco la caja de cigarrillos, pero estaba llena de goma de mascar. Se la enseño.
-Estoy desesperada. Ahora más que antes, soy peligrosa.

-Esto es culpa de la falta de limites, y de intentar ser Marylin Monreo.
Le sonrío, saco un chicle y lo miro.
-Ojalá este tan drogada como para pensar que esto es un cigarro.
Lo como, y lo miro.
-¿Qué haría ahora por un cigarro? Lo que sea, Sería tu esclava por un año, pasaría una maquina podadora de césped sobre tu cresta. No lo sé, estoy por colapsar. Aguarda, ya se cual es mi salvación: He decidido dejar de fumar.

-Sigue soñando. No seré tu esclava aunque esté ebria, borracha, drogada...bueno, me reservo el derecho de estando drogada.
Le miro sonriendo.
-Creo que sin cigarrillos deliro. Asi que ya sabes como hacer para traerme a la tierra.
Le guiño un ojo, saco otra goma.
-¿Teñirme el pelo? Ya es agua oxigenada mi cabello. Creo que me rapare, total loca ya estoy.
Le acerco el paquete de chicles.
-¿Quieres? Puedo asegurarte, son 100% libres de nicotina, porque estos chicles, han decidido dejar de fumar.

-Tu me sigues cayendo mal.
Le sonrío.
-Pero con tus contactos para el tabaco...lo podemos remediar. Aunque si necesitas una noche candente, llamame. Yo y mi voluntad para dejar de fumar estaremos.
Río, tomo otro chicle y le guiño un ojo.
-Estoy tratando de cambair de actitud, gracias por notarlo. Como recompensa, te contaré mi más deprimente secreto...no sé hacer globos.
Le sonrío tirando un chicle viejo.
-Ahora te toca. Pero dudo que superen mi "He decidido dejard e fumar".

-Decir tu secreto más rídiculo.
Lo miro.
-Tu me viste haciendo mi "terapia" si puede decirse. No hay nada peor que eso. Anda, posiblemente no lo recuerde dentro de 5 minutos.

-¿En serio? Entonces estamso en confianza, yo en realidad soy nene. Pero el tabaco me afectó tanto hasta le punto de convertirme en mujer.
Le miro sonriendo.
-¿Qué tipo de problema? ¿Te quedas mudo, te desmayas, tartamudo, se te cae el pelo, no puedes...tu entienes?

-Ya se como se dice a eso. Eres más fácil que cocinar un hot dog.
Le sonrío.
-¿Te tientas con facilidad? No voy a ponerte a prueba. Estoy tratando de abstenerme. Y para colmo tu me pones una prueba tan simple y casi irresistible...no, no lo haré, He decidido dejar de fumar. Eh perdón, de tirarme a tipos que acabo de conocer. Conocidos es otro tema.
Mediosonrío.

Mi rostro cambia de expresión.
-Hagamos esto, no me menciones a ella ¿Podría ser?
Suspiro.
-Siento haberte tratado así, no es tu culpa.
Le miro.
-Pero por lo menos lso mios eran 4 diferentes por noche, yo le sacaba más provecho a mi problema.
Le sonrío.

-450 euros 30 minutos, si que era buena.
Río.
-Si hubieras cobrado, te hubiera alcanzo para poder lavarte toda la cabeza con el tarro de shampoo y no solo la mitad. Eso explica el porque de tu peinado.
Le saco la lengua.
-En cambio, yo peudo teñirme con agua oxigenada todo el pelo. Fui más viva que tu.

-Ya lo sé, tendrás que recomendarme tu marca de shampooo. Aguarda...ahora que veo bien, mejor no. Prefieor quemarlo a torturarlo.
Río.
-Te decimos eso porque envidiamos como lo llevas. Siéntete orgulloso.
Le miro.
-Con dos hermanos chicos y sin mis padres, créeme, el dinero si que me importaba. ¿De dónde obtienes el dinero para mantener a tu peluca en bien estado?

-Mi precio es el HIV. Pero ya estoy muerta, asi que que mas da.
Me siento aburrida.
-Por lo menos, déjame tu peluca en tu testamento. Quiero intentar fumarla algún día.
Le sonrío.
-Yo tengo que ir abriendo las piernas por ahí con viejos babosos pero el señor claro, hace de atracción de feria como dragón libre y cobra. ¿Qué diablso hago siendo vamiresa?
Miro mis brazos, en algunso tenía cicatrices.
-Y yo que pensé que eras una vieja estrella de rock ¿Qué edad tienes, dragoncito? Uno de estos días, mas te vale sacarme a pasear.

-¿Ah no? Entonces no hay trato.
Le sonrío.
-700 años, eso serían 600 años más para fumar...¿Tu madre me adoptará?
Le miro.
-Yo aparento 16, cuidaod con lo que dices que puedes ir preso. Y no hago visitas en privado a cárceles.
Le guiño un ojo.
-Además ñe tengo meido a las alturas, no creo que resulte lo del paseo. A menos de que salgamos a tomar el te al jardín. O mejor, tu te y yo sangre. Que morboso sonó eso.

-Fatltan pocos días para mi cumpleaños, vete preparando. Soy una dama dificil de complacer.´
Río.
-Eso y una caja de cigarros basta. O los cigarros solos también.
Me paro sin perder su mirada, me acerco y tomo su mano.
-No tientes al destino.
La guardo en su bolsillo del vaquero. Pero no me muevo.
-Me gustan como te quedan los 5 dedos en la mano. Si pierdes uno, no podrías hacerte un peinado tan fantástico.
Le sonrío.