El Sótano [Zona de Rol]

-Y eso que está lleno de vampiros por ahi. Tientas al destino.
Le sonrío amablemente.
-mmm, me quedo con las caricias.
Lo miro.
-Genial, ahora soy una perra y tu mi dueño, que linda relación.

-No, esa relación es original.
Río.
-¿Soy un reto? Podrías probar hacerme caricias en otra aprte.
Digo riendo.
-¿Y qué pasa si fracasas?

-No claro, nunca lo haces.
Ruedo los ojos.
-Siempre hay una primera vez para todo. Lamento decirte que fracasaste al hacerme caricias.
Le saco la lengua.
-¿A que sabe el fracaso? ¿Mejor que la victoria?
Río.
-Guíate por tus instintos, si aún los tienes. No te deprimas por favor.

-Entonces te pediré que me vayas a hacer las compras.
Mientras hablo lo despeino.
-Quiero sangre A positivo, la negativa me causa gases.
Comienzo a reir.
-Era broma, eso no fue muy femenino que digamos.

-Pero sino me traes mi sangre, tendré que tomar de la tuya.
Le sonrío.
-Tendrás que ser médico para que te sea mas barato el tema de a sangre.
Suspiro.
-Entonces te pediré toallitas femeninas, alcohol, un paquete de cigarrillos.
Me acerco a su oído.
-Y si tu quieres, condones.
Río.

-Yo bebo, tu luego tendrás que soportarme, así que peor para ti.
Le sonrío.
-Todo o nada, no voy a ir por ahí con la mitad de la lista.
Bufo un poco.
-¿Tu quieres algo más?¿Una muñca inflable, o algo por el estilo?

-Creo que podré con eso. Puedo intentar tener mi 13 cachorrito.
Río.
-¿Tengo plástico de muñeca?
Lo miro alzando una ceja.
-Anda, ve con otra.
Me giro dándole la espálda.
-Búscate una más inofensiva, aburrida y no teñida.

-Yo tengo plástico, botox, pero tu no puedes verlo.
Río.
-Yo soy muy linda y no tendría por que tener celos, pero si,tengo celos porque no quiero que andes por ahí regalando la mitad de la lista. Aunque me gustaría tenerla toda, alguien tiene que ceder.
Me acerco a el.
-¿Respuesta válida?

-Celos, añádelo a mi lista de perfectas imperfecciones.
Le sonrío.
-¿Vas a besarme de una vez o tendré que ir a por ti? Mira que el plástico se derrite.

-Ir hasta ti me derretiría.
Río.
-Haremos esto, nos acercamos mitad de camino cada uno.
Lo miro.
-Ya te dije, los dos tendremos que ceder, a menos de que quieras ser un dominado.
Alzo una ceja acercándome un poco más.

Sonrío y rozo sus labios.
-Pues no me moveré más que de aquí. Demuéstrame que eres el caballero y no el marica.
Le saco la lengua sonriendo.

-Lo mejor es lo hecho por uno mismo.
Me estiro alcanzando sus labios nuevamente.
-Me derrites, por cierto el plástico derretido apesta.
Sonrío sin alejarme.
-¿Qué pasó, te comí la lengua?

-Solo hablo si me hablan. Me ha encantado. Muy...dulce, y salado al mismo tiempo. Hueles a...
Acerco mi rostro y rozo su cuello con mi nariz
-Bosque, tierra, naturaleza, irresistible.
Río contra su cuello.
-O tal vez, te hace falta un baño.